Con el fin de crear un espacio de diálogo sobre los impactos del Reglamento de Deforestación de la Unión Europea (EUDR), una nueva legislación que busca promover un mercado de exportación a la Unión Europea (UE) de productos básicos libres de deforestación, y abordar las preocupaciones relacionadas a dicha norma en las cadenas de valor más afectadas, se llevó a cabo el taller "Retos y oportunidades del Reglamento Europeo sobre la no deforestación para los sectores del cacao y el café", en San Martín.
Este evento reunió a diversos actores de los sectores de café y cacao en la región. La presentación, coorganizada por Solidaridad, la Mesa Técnica del Cacao de la Región San Martín y la Alianza Empresarial por la Amazonía, una plataforma respaldada por USAID, el Gobierno de Canadá y Conservación Internacional, congregó a consultores de la UE que han visitado la región San Martín para evaluar los impactos de la norma sobre los actores de las cadenas de valor más importantes, quienes señalaron que los esfuerzos del nuevo reglamento están destinados a garantizar que los productos forestales, como el café y el cacao, cumplan con los estándares internacionales de sostenibilidad y sean producidos de manera legal. No obstante, esta oportunidad para forjar un futuro sostenible conlleva diversos desafíos.
En el panel de expertos, representantes de organizaciones como ACOPAGRO, Central de Cacao de Aroma de Tocache (CECAT), COOPBAM y la Mesa Técnica del Cacao de la Región San Martín debatieron sobre las distintas necesidades para enfrentar este nuevo escenario. Se discutió sobre el uso de herramientas tecnológicas para la trazabilidad de los productos, la importancia de la formalización de tierras para garantizar la sostenibilidad y la rentabilidad de la producción, así como los incentivos necesarios para que productores en las cadenas en cuestión puedan cumplir con los requisitos de la nueva normativa. Estos temas son cruciales para que productores de la región puedan mantenerse en el mercado europeo, comprador del 29% del cacao y de 51% del café del país.
En este sentido, algunas organizaciones han comenzado a implementar cambios para cumplir con los requisitos básicos de la EUDR. Jesús Díaz, gerente del Programa Cacao de Solidaridad, destaca las transformaciones emprendidas en colaboración con ACOPAGRO y CECAT, en el marco de la Alianza Empresarial por la Amazonía, donde han estado identificando polígonos de 1400 productores entre ambas cooperativas.
Díaz señala que "en este caso, estamos trabajando en polígonos integrales, que incluyen no solo el cultivo de cacao, sino también la superficie forestal, comprometiendo a los productores a firmar acuerdos de no deforestación."
«Nos interesa identificar los obstáculos, como la legalidad de las tierras, ya que trabajamos con comunidades campesinas, nativas y pueblos migrantes que necesitan seguir exportando al mercado europeo. Será un gran desafío, pero estamos comprometidos en seguir adelante»
Fiorella Burneo, consultora de la UE, destaca el compromiso de la institución en evaluar el impacto económico y social en las diferentes cadenas impactadas por la norma, y resalta la importancia de generar alianzas y fomentar un trabajo conjunto. Esto incluye la elaboración de un mapa de actores que abarca al MINAM, MINAGRI, Produce, gremios y otros sectores clave. Por su parte, Javier Sánchez, consultor de la UE, subrayó que
"Europa necesita a los productores peruanos, por lo que este es un desafío compartido entre Perú y la UE".
A pesar de que muchas de las soluciones están en pleno debate para continuar desarrollando medidas que permitan el acceso al mercado europeo, Angélica Fort, gerente de Acuerdos Sectoriales para la Producción Sostenible de Solidaridad, resalta que esta es una oportunidad que prepara a los productores para la posible introducción de regulaciones similares en otros países, como Estados Unidos y el Reino Unido. Además, Fort propone la importancia de gestionar una gama de servicios e incentivos que ayuden a los productores a adaptar prácticas sostenibles que mejoren la calidad de sus productos y los fortalezca frente a los mercados.
Aunque las medidas tomadas por la UE para garantizar la trazabilidad y legalidad en los productos forestales peruanos requieren la colaboración entre actores públicos y privados para asegurar el cumplimiento y, sobre todo, el respaldo a los productores peruanos para que continúen trabajando de manera sostenible, existe un compromiso en múltiples sectores de proporcionar apoyo técnico y financiero para que los productores peruanos cumplan con las nuevas regulaciones. El sector enfrenta desafíos significativos, pero también oportunidades para transformar la producción y garantizar un futuro sostenible.